Harris vs. Trump: las elecciones se ganan con más contraste que ilusión
Iniciamos el boletín en una semana agitada a nivel internacional y nacional
Esta es la primera edición de Mapas de incertidumbre, el boletín que pretende ser un servicio para ayudarte a ordenar reflexiones, ahorrar tiempo y compartir conocimiento cada semana. Me centraré en la política, la comunicación y las campañas electorales, pero con una mirada multidisciplinar, por eso tocaré varios temas como las nuevas tecnologías, la economía conductual o la psicología, entre otros. Y, por supuesto, nada humano me es ajeno.
En menos de un folio
Harris vs. Trump: las elecciones se ganan con más contraste que ilusión
Cada boletín irá introducido por una reflexión personal breve (en menos de un folio) sobre un tema de actualidad de la semana. En este caso, hablaremos de la campaña estadounidense por la definición del ticket Harris-Walz, pero particularmente de una clave transversal de todas las campañas.
Para derrotar a la ultraderecha no basta con denunciar la amenaza que supone. Hace falta contraponer un proyecto alternativo en positivo. Hay consenso sobre esta idea, que se ha repetido durante los últimos años. Siendo cierta, solo es una parte de la verdad.
Por partes. El objetivo fundamental de una campaña electoral es construir una mayoría. Las mayorías se arman creando vínculos con gente que, con suerte, nos verá como el mal menor, y no como sacrificados portadores de un proyecto de redención colectiva (humildad, candidatos). Así pues, el contraste es la clave: no hay posibilidad de construir mayorías sin adhesiones instrumentales y movilizaciones a la contra.
The Lincoln Project fue creado en 2019 por republicanos y exrepublicanos para combatir a Trump. Desde entonces han puesto en marcha numerosas campañas de todo tipo: positivas, neutras y negativas. Las negativas, las más duras, eran mal valoradas: agresivas, desagradables. Lo interesante es que la gente que las juzgaba así, al mismo tiempo mostraba una mayor predisposición a movilizarse contra Trump. Y de eso se trata.
Harris ha fichado a Plouffe para su equipo de campaña, uno de los principales artífices de la estrategia electoral de Obama en 2008. La elección de Harris como candidata —y de Walz como su mano derecha— ha generado una ola de entusiasmo por contraste con la decadencia de Biden. Los mensajes positivos están calando y Trump parece nervioso, como evidenció en su rueda de prensa (error no forzado).
Sin embargo, la clave no estará en que la vicepresidenta de un sistema político deslegitimado, por consiguiente representante del establishment, se convierta de repente en una especie de mirlo blanco ilusionante. Eso no ocurrirá. La clave estará en que los demócratas puedan explicar de manera inteligible las consecuencias nocivas, reales, concretas y tangibles, de Trump y su programa.
Y dentro de esta estrategia de contraste, la defensa de la libertad, la democracia y el pueblo, como vienen señalando desde hace años Lakoff y su equipo de FrameLab. El contraste no tiene por qué ser agresivo o violento. Podemos explicar con claridad las diferencias entre nuestro proyecto y el rival sin necesidad de utilizar artimañas sucias.
Sin ilusión puede haber campaña, aunque no sería lo deseable ni un buen síntoma, pero sin contraste no.
Los 10 (+5) artículos imprescindibles de la semana
En cada boletín compartiré una selección, realizada bajo diversos criterios, de 10 artículos imprescindibles, aunque en la mayoría de las casos habrá un bonus para profundizar en algún tema particular. El orden de los artículos no será ni por fecha ni por nombre, sino relativamente aleatorio: de lo más general (internacional, por ejemplo) a lo más concreto (nacional, por ejemplo).
Cómo los estudiantes de Bangladesh derrocaron a la Dama de Hierro de Asia, de Santiago Montag en Nuso.
Tres gráficos clave para comprender el papel dominante de Pekín en la transición energética mundial, de El Grand Continent.
Tim Walz, el candidato normal, de Xavier Peytibi en El Independiente.
Cómo las élites alimentan el racismo inglés, de Alberto Garzón en eldiario.es.
Un derecho a la contrariedad, de Belén Gopegui en El Salto.
Michael e Imane, de Pablo Batalla en Público.
Desarboladas, de Paquita Suárez en Nortes.
El primer y último bañador de mi madre, de Luz Sánchez-Mellado.
Puigdemont vuelve y se volatiza; Illa, president, de Guillem Martínez en CTXT.
Cohesionar, reactivar y recoser Catanlunya. Los tres retos del ‘president’ Illa, de Mario Ríos en Agenda Pública.
Bonus sobre las elecciones en EE. UU.:
Electoral College Rating Changes: GA Back to Toss-up, MN/NH Better for Democrats, de J. Miles Coleman en The Center for Politics.
Your Tim Walz policy guide: Where he stands on abortions, unions, energy and more, de Politico.
La complejidad del voto hispano en las elecciones de Estados Unidos, de Mark Hugo en El País.
Kamala Harris Has a Scranton Problem, de Katherine Swartz en Notus.
That boring new Harris-Walz logo? It’s actually pretty historic, de Hunter Schwarz en Fast Company.
Recomendaciones: un libro, una película y una serie
El libro: El capitalismo no existe, de Juan Ponte (Trea, 2024)
Juan Ponte es uno de los mejores cocos de la izquierda española. En este libro derriba mitos y mete el dedo en la llaga desde la propia dedicatoria.
La película: Dogman (Luc Besson, 2023)
Esta película es muchas cosas y, aunque no todas son buenas, una de ellas es perros luchando contra los malos y redistribuyendo la riqueza. Actualmente en los cines en España.
La serie: Boss (Farhad Safinia, 2011)
A un político norteamericano de avanzada edad le diagnostican una enfermedad que le hace perder la lucidez poco a poco, pero se agarra al poder y desata una serie de intrigas palaciegas. House of Cards antes que House of Cards.
Bienvenido a Substack. Me parece interesante el sistema de recomendaciones de artículos que propones...